Tampoco se puede olvidar la bondad de sus quesos frescos, como el de Arzúa-Ulloa, el de Tetilla con denominación de origen y su peculiar forma cónica o el queso de Don Simón ahumado y ligeramente picante. Todos ellos están elaborados artesanalmente con la excelente leche de las vacas que pastan libremente en sus verdes laderas. También cabe mencionar la exquisita elaboración de su repostería y concretamente las Filloas, que constituyen el más original y agradable postre que se puede saborear en tierras gallegas.